¿Por qué muchos laboratorios prefieren las buretas digitales?

Hay un procedimiento que permite determinar cierta concentración de sustancias a partir de una solución patrón: la titulación. Es muy importante tanto a nivel educativo como en ámbitos industriales y de investigación. Por ejemplo, en las industrias es implementado en procesos de control de calidad de alimentos y productos farmacéuticos. Entre los materiales de laboratorio usados para realizar la titulación, la bureta es el más importante.

Hay tres tipos de buretas en el mercado actual: ejemplares de vidrio, digitales automáticas y digitales. Cada una necesita de un uso correcto, además de un buen mantenimiento y almacenamiento. Son un buen instrumento para fomentar la ciencia en niños y jóvenes, aunque, en aplicaciones industriales y de investigación, muchas personas prefieren las buretas digitales.

La bureta digital: un instrumento muy estimado en laboratorios

En la mayoría de los laboratorios especializados se utilizan materiales de laboratorio digitales, debido a los beneficios que brindan. Entre ellos, las buretas digitales son de las más estimadas. Se trata de un dispositivo conformado por una parte inferior y una parte superior. En la última, hay un elemento conocido como émbolo, que se acciona de forma manual mediante perillas circulares en sus laterales. En la parte inferior, hay una botella que se ajusta con una rosca.

El líquido dentro de la botella es succionado por el émbolo mediante una manguera, que se conecta en el interior de la botella, lo que dirige hacia una cánula que trasvasa una alícuota de forma ininterrumpida y precisa. En la parte superior de este equipo de laboratorio en Guadalajara, hay una pantalla digital, que muestra la cantidad de líquido suministrado. Hay otro tubo conectado en el interior, de modo que haya una recirculación dentro de la bureta.

Ahora bien, hay varias razones por las que las industrias e instituciones de investigación prefieren las buretas digitales en vez de los ejemplares de vidrio:

• Las buretas pueden ajustarse de forma directa sobre un recipiente, por ejemplo, una botella de plástico o cristal, lo que permite operar con mayores volúmenes de titulante en comparación con los equipos convencionales.
• Cuenta con un sistema en su recipiente cerrado, que reduce los riesgos para los operadores cuando manejan materiales de laboratorio
• Permite realizar titulaciones repetidas a altas velocidades. Además, pueden reiniciar el sistema con solo pulsar un botón, por lo que los lapsos entre una titulación y otras son menores que en los ejemplares de vidrio.
• El equipo integra un sistema de recirculación, que reduce el agotamiento del titulante y evita que haya pérdidas de este.
• Es posible conectar las buretas digitales a la computadora, lo que permite guardar datos y eliminar fuentes de error potenciales por transcripción.
• Las medidas que ofrecen son muy confiables y presentan alta precisión y repetibilidad.

Si bien es un excelente equipo si se hace una buena elección de proveedores de material y equipo de laboratorio, presenta algunas limitaciones. Es un producto más sofisticado y que posee más componentes que los ejemplares de vidrio, por lo que su precio es más alto y se requieren operaciones de mantenimiento más complejas. 

En el equipo, sin importar el modelo, se integran documentos con recomendaciones de uso, mantenimiento y almacenamiento. Recomendamos leer el manual de instrucciones para que aprovechen bien su inversión y tenga una mayor vida útil.

La bureta digital automática

 Hay otro tipo de bureta digital, pero más avanzado: la bureta digital automática. Se diseña con funciones y características sofisticas para que las titulaciones se realicen automáticamente. Su sistema es muy parecido al de los equipos digitales, pero se diferencian en la activación del pistón, que se activa por motor eléctrico. Integra también una pantalla digital que completa el sistema y permite controlar el equipo sin necesidad de intervenciones.

Ofrece los mismos beneficios que las buretas digitales, aunque, al ser más avanzado, ofrece más ventajas. Una de ellas es su nivel de automatización, que elimina considerablemente los errores humanos relacionados con las mediciones, debido a que una gran parte del proceso se efectúa sin necesidad de personal. Incluso, hay modelos que permiten operar a diferentes velocidades de titulación, lo que permite acelerar o ralentizar el proceso para obtener un mejor método.

Al igual que las buretas digitales, su tecnología mejorada hace que los procesos de limpieza y mantenimiento sean más complejos, lo que requiere más mano de obra y tiempo. Por tal motivo, es posible incrementar los costos relacionados tanto con el equipo como con su uso y mantenimiento.

Tanto buretas automáticas como digitales tienen muchas semejanzas, por lo que su uso y cuidado son muy similares. Por ejemplo, ambas necesitan limpieza adecuada con agua destilada, desmontaje para aplicar limpiezas exhaustivas y calibración, que, en casos más exigentes, deben realizarse por laboratorios acreditados.

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