Calibración y mantenimiento de un medidor de pH

Un medidor de pH es un elemento clave del kit de herramientas para los trabajadores industriales y en los laboratorios. Los equipos modernos son muy eficientes y proporcionan resultados muy precisos si se cuidan y calibran correctamente. Sus componentes principales son el electrodo de vidrio y el de referencia, que se encuentran unidos dentro de una delgada membrana de cristal y la electrónica mide la diferencia de potencial o voltaje que hay entre los dos.

Cuando los electrodos están bien cuidados tendrán una vida útil de hasta dos años antes de que deban ser reemplazados; aunque se debe tener en cuenta que su uso en temperaturas muy altas o con químicos altamente abrasivos puede reducir su durabilidad. También es importante que se aseguren que el equipo que adquieran esté diseñado para tomar muestras según sus industrias, ya sea en líquidos, sólidos, semisólidos, entre otros componentes.

Para maximizar la vida útil de los electrodos y garantizar las lecturas precisas, se requiere un pequeño cuidado y atención periódica.

¿Cómo se calibran los medidores de pH?

La calibración de los medidores de pH requiere de dos o más soluciones de calibración que son conocidas como un estándar para garantizar que el electrodo produzca resultados altamente precisos. Los más comunes vienen en pH 4, 7 y 10. Si bien la mayoría de los modelos se calibra con dos soluciones, para una mayor precisión se recomienda tres o más; por lo general se comienza con la solución de pH 7 y luego usará pH 4 o pH 10, dependiendo si la muestra es ácida o alcalina, respectivamente.

Las instrucciones de calibración de sus instrumentos de laboratorio son detalladas por los fabricantes. Por lo regular implica sumergir el electrodo en la solución y esperar que la lectura se estabilice. Posteriormente podrán calibrar el medidor para que lea el pH correcto en la pantalla.

Si sus equipos cuentan con calibración automática se ajustará sin necesidad de realizar otra acción. Este proceso debe repetirse con cada solución que utilicen y asegúrense de enjuagar el electrodo con agua destilada entre cada elemento para evitar que se contaminen.

¿Cómo limpiar el electrodo de medidor de pH?

La limpieza de los electrodos del medidor asegurará que se mantenga en óptimas condiciones, así como garantizará la previsión y la eficiencia. Para ello es necesario utilizar una solución especial de limpieza y deben sumergir el electrodo durante 15 a 20 minutos, luego se enjuaga con agua destilada y almacenan como recomienda el fabricante. Para los que están diseñados para su uso en suelo también deben eliminar otras impurezas y residuos que quedan en el electrodo después de su uso.

¿Cómo deben guardar los medidores cuando no los utilizan?

Cuando no estén en uso, los electrodos deben mantenerse sumergidos en una solución de almacenamiento, lo que evita que se seque y lo mantiene limpio y protegido hasta que sea necesario utilizarlo. La mayoría de los medidores de pH vienen con una tapa especialmente diseñada, en la cual se puede agregar una pequeña cantidad de solución de almacenamiento.

Asegúrense de verificar el nivel de la solución de almacenamiento regularmente, ya que se evaporará con el tiempo si no los utilizan por varios días o semanas. Si se permite que el electrodo se seque, ya no funcionará correctamente y tendrán que ser reemplazado.

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