¿En qué consiste la limpieza, desinfección y esterilización de instrumentos de laboratorio?

La limpieza, desinfección y esterilización de instrumentos de laboratorio son tareas fundamentales para reducir riesgos asociados con la contaminación cuando estos se utilizan en entornos que presentan una alta carga micobacteriana.

Por tanto, como parte de los programas de limpieza y seguridad en la industria farmacéutica, alimenticia, bioquímica y en entornos de servicios sanitarios se deben implementar procesos que garanticen que tal limpieza, desinfección y esterilización se realicen de manera correcta, según las características específicas del tipo de trabajo realizado en cada entorno.

Estos procesos comienzan con un lavado del instrumental y materiales de laboratorio. Una vez hecho esto se puede proceder a su desinfección, y en caso de ser requerido, a su esterilización. Todas estas tareas en los entornos que acabamos de mencionar se encuentran reguladas por una normativa estandarizada y en todo caso están a cargo de personal capacitado para llevarlas a cabo de manera satisfactoria.

La limpieza, considerada el paso inicial e imprescindible para para los procesos de desinfección y esterilización, consiste en la remoción de sustancias y materiales que se encuentran adheridos en instrumentos, materiales y superficies de trabajo utilizados en la industria.

Para llevar a cabo la limpieza se recomienda utilizar agua, una solución de detergente y productos especiales formulados a base de enzimas para reducir la contaminación bacteriana entre 3 y 4 logaritmos.

Si bien, podría pensarse que la limpieza no tiene un gran impacto sobre el contenido micobacteriano en el material, es imprescindible que se realice correctamente pues de lo contrario los esfuerzos de desinfección y esterilización son inútiles. Esto se debe a que la suciedad contenida en las superficies crea una barrera que impide la acción de los agentes desinfectantes y esterilizantes.

Después de realizar la limpieza se puede proceder a la desinfección que si se lleva a cabo correctamente permite reducir la contaminación microbiana entre 3 a 5 logaritmos. La desinfección permite destruir agentes contaminantes que se encuentren en formas vegetativas, sin embargo, el procedimiento no tiene acción sobre las esporas bacterianas, por ello es necesario recurrir a la esterilización.

La seguridad de la desinfección es de 1 en 1 000, mientras que la de la esterilización es de 1 en 1,000,000, reduciendo en 6 logaritmos la contaminación inicial. Es a través de un adecuado proceso de esterilización que los objetos quedan libres de cualquier microorganismo contaminante, ya sea que se encuentre en estado activo o latente.

Además de seguir procesos adecuados para la limpieza, desinfección y esterilización es necesario contar con instrumentos para laboratorio de excelente calidad y para ello los invitamos a conocer la línea de productos que en El Crisol ponemos a su alcance. En nuestro sitio web encontrarán nuestro instrumental, material y equipos organizados en diferentes catálogos y si necesitan asesoría para su elección pueden contactarnos, con gusto los atenderemos.